Por Yohanan Núñez
Muchas personas suelen tener una percepción distorsionada de los tiburones, catalogándolos de ser “monstruos brutales en busca de sangre”. Esto a menudo se interpone en el camino de su verdadera importancia: los tiburones son cruciales para el medio ambiente marino.
Situados al tope de la cadena alimenticia, los tiburones permiten que exista un mecanismo para la regulación de ciertas poblaciones de peces en el ecosistema. Su intervención evita, que, por ejemplo, los peces enfermos puedan propagar cualquier patógeno a los demás, al eliminarlos de la población. Podríamos verlos como el sistema inmunológico del océano. Imagina que sucedería si los seres humanos no tuviéramos sistema inmunológico. Todos nos enfermaríamos y lucharíamos por mantenernos con vida.
Pero a pesar de su importancia, los tiburones siguen siendo amenazados todos los días, sobre todo porque debido a décadas de desinformación en forma de películas, y otros medios, muchas personas entienden que deben ser eliminados.
Este fue el caso en un lugar al sur de la República Dominicana, Nizao es una comunidad donde días pasados, un grupo de pescadores locales capturó y asesinó brutalmente a un ejemplar de tiburón toro, a pesar de que existe una veda permanente ante la captura y comercialización de todas las especies de tiburón en nuestras aguas, debido precisamente a su importante papel en la salud arrecifal.
En estas imágenes difundidas a través de redes sociales, se evidencia que pescadores atacaron a un tiburón toro (Carcharhinus leucas)(Vulnerable a la extinción) en Nizao, Peravia.
Según el biólogo marino Daniel Veras MSc. de la Fundación Grupo Punta Cana, estos animales funcionan como depredadores de tope, por esto actúan como control desde arriba hacia abajo en la cadena trófica, estos son actores cruciales interviniendo en interacciones como cascadas tróficas.
El gerente programa de conservación marina para el caribe central de The Nature Conservancy, Aldo Croquer PhD nos explica cómo funcionan estas cascadas:
Imaginemos que existen 3 especies de peces, supongamos que una de estas es competitivamente superior a las otras dos. Resulta que la coexistencia de las tres especies sólo es posible, si el tiburón depreda sobre la que es competitivamente superior.
Si eliminásemos al tiburón, las otras dos especies serían desplazadas, y eso a su vez tiene impacto hacia abajo en la cadena alimenticia.
La especialista Karina Hierro del Acuario Nacional nos explica que el rol que desempeñan los tiburones en los océanos es similar al de doctores del ecosistema, que mantienen regulada la salud de los mismos, evitando la diseminación de enfermedades y patógenos.
No es la primera vez que se hace viral en las redes atropellos cometidos hacia tiburones en nuestras aguas, en el 2019 un tiburón Mako (Isurus oxyrinchus) (En peligro de extinción) sufrió lesiones en Sosúa, y en Abril de este año un tiburón azul (Prionace glauca)(En peligro de extinción)fue asesinado por un barco en Bayahíbe, entre otros casos, lo que debería alarmarnos ya los tiburones están siendo eliminados de sus ecosistemas y esto podría tener repercusiones sobre la salud de nuestros arrecifes.
Tras el revuelo de activistas en redes sociales, el Servicio Nacional de Protección Ambiental (SENPA) reportó que los pescadores responsables del siniestro hacia el animal, fueron intervenidos y apresados, y su caso ahora queda en manos de la justicia.
Sin embargo… ¿Qué exactamente logra este tipo de acciones punitivistas sobre el bienestar ambiental a largo plazo?
Horas de cárcel sin crear consciencia, son huecas.
Existe una dirección de educación ambiental en el Ministerio de Medio Ambiente, capaz de elaborar programas de educación específicos sobre este tipo de actores. Por lo que castigar de manera reactiva, sin un plan de prevención a través de educación ambiental coherente y accesible ¿qué exactamente nos deja… ¿Hemos siquiera considerado el nivel de riesgo incluso a sus propias vidas al que viven expuestas estas personas en contacto directo con animales que podrían ser peligrosos para sí?
El Tiburón Toro, aunque de suma importancia para la salud de nuestros ecosistemas marinos, es conocido por su agresividad impulsiva, que según el Archivo Internacional de Ataques de Tiburones (ISAF), los hace históricamente responsables de al menos 100 ataques no provocados contra humanos en todo el mundo, 27 de los cuales han sido fatales. Para dar contexto, este es un número mucho más bajo que el de un mamífero mucho más popular, conocidos por ser agresivos, los hipopótamos matan a 500 personas anualmente en África.
Afortunadamente no se han reportado ataques en nuestras aguas, pero si existen personas vulnerables a estos, conociendo la impulsividad de estos formidables animales, son los pescadores. Sin prevención por parte del Estado dominicano, no sólo se repetirán los casos de abuso animal, sino que también nos exponemos a posibles tragedias humanas.
En vez de reacciones ante casos aislados, pedimos un plan de prevención y educación coherente, si como país insular queremos mantener nuestros recursos pesqueros, necesitamos a los tiburones para que regulen nuestras poblaciones de peces.